domingo, 19 de agosto de 2012

Por La Cueta ( Babia )

Tomado del mapa de Somiedo de Adrados
     La Babia leonesa, al sur de la cordillera cantábrica, agrupa varios dosmiles en una zona tan bella como agreste; fuera de la crudeza de los inviernos nos muestra su cara amable, de valles, lagunas, vegetación y vida salvaje. En enero estuvimos Antonio, Olaya y yo en el Pico Solarco; hace dos semanas Aurora y yo conocimos la Laguna Las Verdes y hoy daremos una vuelta por los puertos de La Cueta y Quejo.


Foto tipo "Twenty" al inicio de la ruta



     De nuevo en La Cueta; en el camino aquí pudimos ver bastante de cerca un lobo. Paramos el coche, por lo raro que es avistar uno por el día y tan cerca y aunque lo perdimos de vista, enseguida lo seguimos viendo por una cresta hasta que se esfumó.




     La Cueta tiene sus calles arregladas desde el verano pasado, aunque eso no evita que se vean muchos solares y casas caídas como consecuencia de la bajada de población estable.


El molino del rio Sil a la salida de La Cueta
Los curiosos cerramientos curvos de los prados

     Comenzamos a caminar en dirección a los puertos de Covalancha, el camino que seguimos el año pasado para subir al Cuetalbo y a los Picos de la Mortera.





      Al poco cogemos una desviación a la derecha que sube hacia La Pena, con las antenas de teléfono y televisión y hay unas cuantas paredes donde está la escuela de escalada La Cueta.


      Las praderías sobre las que pasará nuestro recorrido; por la primera vaguada, entre el pico Gagucheiro y el pico Salgueiro subiremos. Al fondo está la Peña La Crespa.  
  

     No es muy habitual subir una vaguada estrecha porque concentraría la caída de piedras o el agua, pero intuímos que el camino es por aquí porque se ve pisado y no hay alternativa por la loma. Acertamos, porque enseguida encontramos "jitos" que nos confirman que estamos en el camino.

Por la riega de Vallina Lluenga
Se sube bien, hasta llegar a algún estrechamiento que se pasa por la izquierda



     Al fondo ya podemos ver las laderas de la Peña Los Años, que podría ser nuestro objetivo para hoy.
 

 

     Después de perseguirla para conseguir las fotos, logro ver posada esta  mariposa de gran tamaño y alas casi transparentes.

Cardo blanco




Una mata entera de clavelinas
 

     Después de superar la riega por su cauce hasta este punto, llegamos a las praderías de la Vallina Lluenga. Parece un lugar apropiado para las ovejas, pero no hay rastro de antiguos corrales o chozos de pastor.

Al fondo la collada Las Malvosinas
 

     Empezamos a subir por esta loma para intentar llegar a la Peña Los Años; pero hoy es un día de muchísimo calor y nos cansamos demasiado. Lo pensamos mejor y cambiamos la ruta; vamos a la collada la Malvosina, caminando tranquilamente y sin tanto desnivel.
 

     Grandes matas de brezos que con el calor prece que "destilan" más cantidad de perfume, con las abejas y mariposas aprovechando su floración.

Orégano silvestre
Té de monte (acinos alpinus)
Como siempre, rebecos vigilantes





     Llegando a la collada La Malvosina vemos hacia atrás los puertos de esta Vallina Lluenga, y por detrás el triangular Cornón y la caliza blanca de la Penouta, sobre las praderías de Sta. María del Puerto.


     Al asomarnos a la collada, la sorpresa es que no se asoma a otro valle, sino que hay otras praderías que forman otro puerto alto. De frente tenemos la Peña Redonda donde sube una persona que destaca en la línea del cielo.

Plantas silvestres de ajo

     En la vega alta no hay salida para las aguas, que se sumen por una esquina del valle.


     Vista hacia atrás, con la Peña Los Años en el centro, y por fin rastro de los antiguos usos ganaderos de estos puertos altos a casi 2000 metros de altura.


     Girando hacia el collado siguiente, la forma de la Peña Redonda cambia, presentando unos grandes paredones sobre el valle.


     Bordeamos la loma hacia la collada la Malvosa, nuestro próximo destino. Ya hemos decidido continuar la ruta en sentido circular, y no volvemos por la riega de la Vallina Lluenga.


    Estas son, según interpretamos en el mapa, las Colladas de  Pasto Común. Sólo vemos por aquí un grupo de yeguas con sus potros y nada de ovejas.


Hacia atrás, la Peña Redonda




     Desde la collada se abre otra perspectiva nueva: desde el Muxivén al Cornón y la Penouta. Abajo a la derecha, tras dar la vuelta al Salgueiro,volveríamos a La Cueta. Por la izquierda el valle baja hacia Quejo.

El Muxivén
El Cornón y la Penouta

     A la izquierda bajando tenemos los Puertos de Pasto Común y la pradería de Quejo.

Venimos de la collada la Malvosa, allá al fondo
 

     Mientras hago esta foto de estas curiosas flores, Aurora descubre movimiento en una zona de escobas: unos rebecos -primero pensamos que eran corzos, por estar por las praderías- cambian de dirección al vernos. Os pongo una serie de fotos, primero se separan y luego se vuelven a reagrupar: ¡vaya carrera y menudos saltos!.


 




 



     Aquí estamos de nuevo, al principio de la riega de la Vallina Lluenga por donde empezamos a subir por la mañana.


     Dejamos atrás la riega, entre el pico Gagucheiro a la izquierda y el Salgueiro a la derecha, al que al final hemos dado toda la vuelta. 


     Asomados de nuevo al valle del Sil y La Cueta, tenemos al fondo la Pena Chana y sobresaliendo los Picos Albos; sólo nos queda bajar al camino de La Cueta.


      Bajo las nubes que se van formando quedan los Picos de La Mortera, en el límite con Somiedo. Con el fuerte calor del día no sería extraño que al final hubiese tormenta; por lo menos las nubes ya están creciendo.


     Y aquí estan Javier y Aurora, refrescados en el río y a punto de tomarse un revigorizante café con hielo en el bar de La Cueta.
     Espero que el recorrido de hoy, senderista de montaña, os haya gustado. A nosotros nos sirvió para aumentar algo más el conocimiento de esta zona norte de Babia lindante con Somiedo.

¡ Un saludo, amigos !

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